Más de 20 años con el VIH bajo control sin tomar tratamiento: todo lo que sabemos sobre los controladores de élite excepcionales
Menos reservorio viral, una fuerte respuesta específica contra el VIH y virus defectuosos son algunos de los puntos clave que permiten controlar el VIH a estas personas, que suponen un gran modelo de curación funcional para la comunidad científica
La infección por VIH, si no se trata con terapia antiviral, conduce a la destrucción del sistema inmunitario, lo que genera una grave inmunodeficiencia que acaba siendo mortal en la inmensa mayoría de casos. Sin embargo, menos del 1% de quienes adquieren el virus son capaces de controlarlo eficazmente sin desarrollar la enfermedad, conocidos como controladores de élite. Algunos de estos individuos muestran una capacidad excepcional para mantener niveles indetectables del virus durante más de 20 años sin tratamiento, denominándose controladores de élite excepcionales. Javier Martínez-Picado, investigador ICREA en IrsiCaixa, reflexiona: "¿Qué les permite controlar tan eficazmente el virus? ¿Cómo podemos aprender de estos casos para desarrollar estrategias terapéuticas especialmente oritentadas a la curación del VIH?"
Para abordar estas preguntas, el equipo del grupo de Retrovirología y Estudios Clínicos (GREC) de IrsiCaixa, junto con el National Institute of Allergy and Infectiosu Diseases of the National Institute of Health, ha compilado estudios internacionales sobre estos individuos, publicándolos en la revista Med de Cell Press. Han podido afirmar que una confluencia de factores genéticos, virológicos e inmunológicos contribuyen a esta habilidad para controlar el VIH, ofreciendo un modelo prometedor para la gestión funcional de la infección.
Un reservorio viral mínimo y virus defectuosos
La infección por el VIH puede tratarse pero no curarse de forma generalizada. Esto se debe a la existencia de reservorios virales que persisten a pesar del tratamiento antiviral. Este reservorio viral, que comprende células con VIH en estado latente capaces de reactivarse si se interrumpe el tratamiento, ha sido objeto de extensivos estudios entre los controladores de élite excepcionales. "Estos individuos presentan de 3 a 10 veces menos reservorio que aquellos que reciben tratamiento antirretroviral. Este nivel es notablemente reducido incluso en los tejidos linfáticos, donde típicamente se encuentra más concentración de reservorios.", comenta Maria Salgado, investigadora de IrsiCaixa.
A pesar de grandes esfuerzos, la comunidad científica no ha logrado aislar y estudiar virus con capacidad replicativa en estos pacientes. No obstante, mediante técnicas de alta precisión, han podido secuenciar el virus y han observado que su genoma contiene modificaciones que limitan su capacidad de multiplicarse con normalidad, conduciendo a una baja replicación viral.
Buena respuesta inmunitaria específica contra el VIH
Los estudios indican que los controladores de élite excepcionales tienen al menos un factor genético protector asociado con la respuesta inmunitaria contra el VIH. A pesar de que estos factores también están presentes en personas que progresan en la infección, parece que en estos individuos la respuesta inmunitaria de las células T específica contra el VIH juega un papel crucial. Según Martínez-Picado, "en ausencia de tratamiento antirretroviral, el virus tiene una ventaja considerable. Sin embargo, tener un virus menos activo es solo una parte del equilibrio; una respuesta inmunitaria robusta, junto con otros factores como la inmunogenética y la preservación de células inmunitarias, inclina la balanza a favor del huésped.”
El impacto inicial de la infección y las perspectivas futuras
Aunque el tratamiento antirretroviral actual funciona de manera excelente y es la mejor opción para las personas con VIH, encontrar una cura sigue siendo un objetivo prioritario para la comunidad científica. “Estamos explorando posibles estrategias para permitir que las personas con VIH vivan sin necesidad de un tratamiento crónico. Contar con un modelo de éxito, como los controladores de élite excepcionales, es crucial para futuras investigaciones. Hasta entonces, aunque aún falta tiempo, todas las personas diagnosticadas con VIH deben seguir el tratamiento de manera rigurosa, ya que esto permite llevar una vida larga y saludable”, subraya Martínez-Picado.
Comprender los mecanismos de los controladores de élite excepcionales representa un avance significativo. “Estos perfiles demuestran que el equilibrio entre el huésped y el virus se establece temprano en la infección. Detectar rápidamente la infección y actuar con prontitud, ya sea mediante tratamientos actuales o futuras intervenciones, es esencial para inclinar la balanza a favor del huésped”, concluye Maria Salgado, investigadora de IrsiCaixa.